martes, 3 de diciembre de 2013

LOS TESOROS DE ENRIQUETA Y MARITA

Como si de cofres con tesoros se tratara, recibo los envíos de fotografías y curiosidades que me hace Enrique, hijo de Marita Vilar y José María Teso, y nieto de la tía Enriqueta. Ha buscado en casa de su madre y no sé como agradecerle el trabajo que se está tomando, desempolvando y clasificando viejos papeles y fotografías guardadas durante años por su madre. Desde documentos insólitos para nosotros ahora, como cartillas de racionamiento de varios Carrascosa, a fotografías de la tía Aurelia y Germán... desde dibujos de su padre realizados en el Hogar Recreativo y Cultural y en la Institución de Amigos de la Enseñanza, tan unidos a la familia por tantas razones, a versos de Lacort... desde retratos de José Vilar,  marido de Enriqueta, a páginas del boletín del Hogar. Hoy vemos algunas de estas cosas y el resto más adelante.

 

Marita con Lucía Carrascosa y Pepe Ibáñez

 

 

Cartilla de racionamiento de Enriqueta Carrascosa. 1952.

 

 

Cartilla de racionamiento de Joaquín Vilar. 1951.

 
 

La tía Enriqueta y José Vilar. La segunda de los hijos de Pío Carrascosa y Lucía Beltrán, enviudó  demasiado pronto quedando al cargo de sus cinco hijos: Marita, Joaquín, Pupi, el Niño y Moreni.

 

Mi padre le guarda un cariño especial a Marita ya que convivieron varios años y casi le crió como una hermana mayor. Como le dije a Enrique, creo que su madre merece nuestro homenaje y nuestro interés, no solamente por formar parte de la familia. Con noventa y ocho años, es testigo excepcional de la historia que estamos contando, y conserva, como buena Carrascosa, una memoria extraordinaria.


5 comentarios:

  1. Me comento mi padre ayer,ninin, que hacia como 40 agnos que no se veian, y que le recordaba, que era el hermano pequegno de Je(la verdad es que mi padre es un calco de mi tio) y que incluso se acordo de una poesia que la habian escrito hace agnos,y la recito de memoria!!impresionante

    ResponderEliminar
  2. Qué guapos mis abuelos. La foto de él, la recuerdo colgada en la pared del comedor de mi abuela en Cardenal Silíceo 8. Fue cuando hizo la mili, por suerte se salvó de ir a la guerra de África gracias a que su padre pagó por ello, era legal el trueque, si podías permitírtelo iba otro pringado por ti. Qué horror las guerras y que siempre paguen los mismos. Es evidente que José Vilar era muy guapo, y según he sabido muy bueno, según mi abuela un poco o un mucho utópico, creía que en España se desarrollaría un progreso socialista. Murió antes de la guerra. Cuando mi padre me hablaba de él, que por cierto, cantaba muy bien, siempre acababa contándome el día del entierro. Mi padre desde lejos vio pasar el coche de caballos. a partir de ese día cambió la vida de la familia y vinieron los tiempos difíciles de subsistencia precaria, y después la guerra, y la posguerra... No me extraña que a mí abuela le cambiase la expresión para siempre, nada que ver esta foto con la que le fue hecha en la casa de sus padres junto a la gallina, me encanta verla allí, joven, sonriente y con todo por venir. Claro que volvió a sonreír, era una mujer inteligente y no podía ser de otra manera, pero su vida se torció con la muerte de José Vilar. Su vida fue un antes y un después de esta pérdida, y la expresión de la foto es muy real, aunque Enriqueta fue mucho más que esto. Tanto mis primos como yo, tenemos mucho que contar sobre ella. Seguiremos haciéndolo en este apartado que Carlos ha reservado para los VILAR CARRASCOSA. Gracias.

    ResponderEliminar
  3. Por supuesto, como ya he dicho en alguna ocasión, estos comentarios son la salsa del blog, y seguro que nos seguiremos enterando de montones de cosas. Vuestro es.

    Mi padre recuerda a la tía Enriqueta siempre mayor. Claro, el nació en 1930 y al poco tiempo debió morir José Vilar. Para los niños, los mayores siempre les parecen muy viejos y tu abuela debió tener la vida complicada, aunque realmente no lo era tanto.

    Besos

    Carlos

    ResponderEliminar
  4. !MUCHAS FELICIDADES MARITA!
    Cumplir 99 años con tus condiciones físicas y mentales es algo a lo que seguro nos apuntamos todos los Carrascosa.
    Espero que el próximo año celebremos los 100 con una fiesta digna de ti.
    Eres una persona admirable en muchos, muchos sentidos, además de inteligente, sensible y discreta, y ante todo una buenísima persona a la que tengo que agradecer mucho cariño y mucho de la que aprender.
    Tía Marita, has sido todo una suerte contar contigo en mi vida. Muchas gracias y FELIZ DÍA DE TUS 99 AÑOS.
    Un beso

    ResponderEliminar
  5. Luisito, aquel niño al que crió, y toda su familia nos unimos a la felicitación de cumpleaños de Marita. Noventa y nueve, casi nada!

    Personalmente, ha sido un auténtico placer conocerla y charlar con ella, de la que siempre escuché hablar mucho y bien. Poder oir anécdotas de otras épocas contadas por alguien que fue testigo y parte, no sólo me interesa, también me emociona. Ojalá tenga la oportunidad de volver a coincidir con ella, la escucharé con mucha atención.

    Marita, lo dicho, muchísimas felicidades de parte de todos nosotros. Un beso grande.

    Carlos

    ResponderEliminar